La izquierda odia y la derecha roba;
la izquierda es irreligiosa y marxista,
y la derecha en cambio es muy egoísta
y además cree que la gente es boba.
La izquierda trata al pueblo con la escoba
o con látigo al estilo comunista;
la derecha va de espiritualista
y a los banqueros les da mucha coba.
Pero ya no hay izquierda ni hay derecha,
las hemos borrado de nuestras vidas
porque las dos están bajo sospecha
pues vemos que las dos están podridas.
No queremos más política ficticia,
lo que hoy todos queremos es justicia.