Ya se alquilan úteros de ocasión,
tal como les gusta a los progresistas
y a ciertas alocadas feministas
de esta sociedad en putrefacción.
Avanzamos en nuestra corrupción,
alentados por nuestros socialistas,
pues según sus programas izquierdistas
este alquiler es una libre opción.
Una prostituta puede ser fina
y ejercer su trabajo con esmero.
Si alquila legalmente su vagina
¿por qué no ha de alquilar su vientre entero?
Eso piensa la tropa feminista
y lo impondrá el partido socialista.