Llevaron a Leonor a la Santina,
y es una visita muy acertada,
pues la tarea que tiene asignada
requiere una gran ayuda divina.
Cuando todavía era chiquitina
sus padres le hicieron la gran putada:
fue a ver a una familia desmadrada,
pues Ricky a las madres les tiene inquina.
Ahora que su tarea real empieza
como habitante ordinaria de la Zarzuela,
y aspirante legal a la realeza,
ojalá que use mejor la cabeza
que su antepasada tatarabuela
la muy calentorra reina Isabela.