Mariano Rajoy, la Kirchner y el Lula
ante algún juez tendrán que declarar,
porque su manera de gobernar
fue injusta, calamitosa y fatula.
Si la triste justicia no recula,
los tres nos van a tener que explicar
por qué se dedicaron a robar
como si para ello tuvieran bula.
Todas las miserias que padecemos
provienen de los malos gobernantes,
pero por idiotas las merecemos
pues nosotros los escogimos antes,
y ya es hora de que reflexionemos
para no escoger siempre a maleantes.