Hoy es peligroso pronunciar FRANCO,
porque si lo repites, te salpica.
Tampoco conviene decir MARICA
porque te hacen de mil críticas el blanco.
La palabra NEGRO ahora sufre atranco
pues como un racista te clasifica,
y si dices que eres MACHO, eso implica
que las Femen te tiren a un barranco.
Por el contrario, es común estos días
que en el cine y en la televisión
digan toda suerte de groserías
sin respeto a la buena educación.
Y ya se puede decir que una es puta
pues ya es muy honrado ser prostituta.