Salvador Freixedo

POBRE NIÑO SIRIO AHOGADO EN LA PLAYA

¡Pobre niño sirio, ahogado en la playa,
amortajado de espuma y arena,
cómo se inunda mi alma de pena,
y al verte allí mi corazón desmaya!

Viéndote tan inmóvil, mi ira estalla
ante una sociedad tan cruel y obscena,
que no reacciona y hasta da por buena
tanta guerra genocida y canalla.

¡Pobre niño! Te acarician las olas,
y tu afligida madre, a esta hora,
en cualquier esquina de su exilio, a solas,

acordándose de su pequeño, llora.
¡Pobre niñito en la playa tumbado,
esta loca humanidad te ha matado!

Más sonetos de Salvador Freixedo

DEMOCRACIA

Suelen decir que cuando hay democraciaes el pueblo quien propiamente manda.El que tal dijo, muy despistado andaporque afirma una tremenda falacia. La democracia tendría eficaciasi

CÉSAR VIDAL

Desde el día en que a don César Vidalse le excitó su veta protestanteya no hay persona culta que lo aguantey ha comenzado a caerme