La Delgado,Villarejo y Garzón
son una malísima trinidad,
que es muy superior a cualquier maldad
que usted albergue en su imaginación,
Son crema y nata de la corrupción,
son la esencia de la perversidad,
y son una enorme calamidad
que le ha caído arrriba a nuestra nación,
Nuestra desventura nunca se acaba,
nos sobran políticos aforados,
nos sobran ministras de la caraba,
y nos sobran jueces desaforados,
y tantos personajes heredados
de las cloacas de Alfredo Rubalcaba.