Cuando llegó, tras Barreda,
Dolores de Cospedal
se llevó un susto fatal
porque ya no había moneda,
pues Barreda hizo almoneda
del tesoro regional.
Hizo las cuentas tan mal
que de aquello nada queda.
Mas Barreda con premuras,
rápido y sin avisar
eliminó las facturas
que aún estaban sin pagar.
Barreda dejó al marchar
un millón de barreduras.