Muchos se creen ingenuamente
que la política es para servir.
Y a estos pobres les tengo que advertir
que se equivocan miserablemente.
La política, para mucha gente,
es un gran método para vivir;
no hay que hacer nada, y cuando hay que salir
se sale con fuerte cuenta corriente.
Los políticos son unos mangantes
que trabajan muchísimo y a destajo
para robar el fruto del trabajo
de los miles y miles de currantes,
y entre ellos se ríen, muy por lo bajo,
de lo atontados que son sus votantes.