Nosotras resolvemos, pues nosotras parimos,
nosotras los gestamos y los amamantamos;
que nos dejen tranquilas; ya no queremos amos
y sobre nuestros cuerpos nosotras decidimos.
Abortar es muy libre, muy alto lo decimos,
y de este gran avance orgullosas estamos
sabemos que al hacerlo, a nuestro hijo matamos,
pero de esta matanza no nos arrepentimos.
Esta acción progresista ahora está tolerada;
un feto o un embrión es un niño pequeño;
mas la criatura está como en un sueño
y cuando la destrozan no puede sentir nada.
Esas son menudencias cuando uno es progresista
y son sin importancia para un buen socialista.