El fraude cibernético del 28
que tiene raíces en el extranjero,
no será el último ni es el primero,
pero fue un excelente tocomocho.
Pedro Sánchez se apellida Pinocho
y tuvo un resultado chocarrero,
pues le prestó ayuda de cocinero
Tezanos con un CIS del todo pocho.
Cada vez que hay algunas votaciones
los chicos del PSOE son muy expertos
en jugar a las desapariciones
y en hacer que también voten los muertos.
Y tras el pucherazo colosal
nos amenaza una quiebra total.