ETA entregó por fin sus arsenales:
tres tirachinas y dos pistolines,
más una escopeta de balines,
pues ya no quieren ser más criminales.
Los pacificadores fantasmales
firmaron oficiosos papelines,
siendo testigos de los buenos fines
que les prometieron los abertzales
La táctica de ETA es causar molestia,
muchos tumultos y kaleborroca,
cualquier burrada les parece poca
porque su patriotismo es a lo bestia.
En CIU quieren ser libres, negociando,
los vascos quieren ser libres, matando.