El tremendo casoplón
que se compró PabLenín,
nos declara un poquitín
cómo piensa este bribón.
No le llamaré cabrón,
porque le falta un pelín,
(aunque ahora no tiene fin
la libertad de expresión).
Desde el programa “la tuerka”,
con patraña tras patraña,
y mucha mentira puerca,
engañó a toda España.
El líder del populacho
es un podrido ricacho.